jueves, mayo 12, 2016

Variedad de lecturas

Desde que escribí la última entrada de este blog, varias son las lecturas que me han reconfortado. Diversos motivos me han impedido dedicar el tiempo necesario a su reseña. Como algunas me han parecido especialmente interesantes, no quisiera que faltará al menos un breve testimonio. Así que allá vamos:

- Voces de Chernóbil. Una de las obras más reconocidas de la última premio nobel de literatura, Svetlana Alexiévich. Un libro que acongoja y asusta por igual. Personalmente que me considero un lego en la materia ya es suficiente descubrimiento el saber que fue Bielorrusia, en lugar de Ucrania uno de los terrenos más afectados por la catástrofe. Esperaba encontrarme un reportaje profundo sobre lo sucedido, sus causas y sus consecuencias. En lugar de eso, el texto es un continuum de testimonios de personas afectadas de una u otra forma por lo que sucedió aquel 26 de abril. Ya el primer testimonio es de los que entrecortan la respiración y hace que las lágrimas se caigan de los ojos. El libro tiene además la virtud de enfrentarnos a la magnitud de una catástrofe que probablemente todavía nos esté pasando factura. Verdaderamente sobrecogedor.

- Baleak ikusi ditut. Un sorprendente comic de Javier de Isusi que tiene la virtud de enfocar un problema como el de la violencia en Euskadi desde múltiples puntos de vista, pero que como no puede ser de otra manera acaban por confluir y humanizar a todas las partes: victimas, victimarios, ETA, GAL, amistades, iglesia, familia… Un verdadero mosaico de una realidad tan conocida en Euskadi y con una sorprendente sensibilidad. Está también disponible en castellano. Altamente recomendable.




- Kiki de Montparnasse. Como veréis esta temporada le he dado duro al comic. He aprovechado para leer alguna cosa nueva y recuperar joyas atrasadas como este de Catel y Bocquet, que es altamente sugerente. Un verdadero placer sumergirse en esta obra que recoge la azarosa vida de una de las modelos favorita de la bohemia del primer tercio de siglo en París. Ensalzada por Man Ray, por las páginas de este comic desfilan buena parte de los artistas que marcaron un antes y un después en el arte del S. XX. El dadaísmo, el surrealismo, la azarosa vida de Kiki hasta su autodestrucción final es una verdadera gozada. Para no perdérselo.


- Maus. Otro verdadero clásico de Art Spiegelman sobre el que sólo se puede decir que toda la fama que tiene está más que justificada. Desde su hallazgo de convertir a judíos en ratones, nazis en gatos y americanos en perros; hasta la plasmación en la narración de sus propios problemas de personalidad y el revelar la vida de su padre como víctima de uno de los episodios más oscuros de la historia sin ocultar sus discrepancias y peculiar forma de ser… El primer comic de la historia en ganar un premio Pulitzer.. Más que merecido sin duda.



- La Casa. No puedo ocultar mi devoción por Paco Roca. Su dibujo natural. Su sensibilidad para enfrentarse a cualquier historia. Su, a mi parecer, particular uso del color… Todo, todo en los comics de Paco Roca es digno de alabanza y La Casa no es menos. La relación con el padre a través de esa casa a la que tanto tiempo dedico. Su desaparición. La relación familiar. Esa metáfora del paso del tiempo reflejada en el ignoto futuro de la vivienda. No encuentro palabras para expresar todo lo que transmite este comic de una manera tan simple y cercana. Precioso. Elegido mejor comic nacional de 2015 por Cegal. 


- Erase una vez en Francia. Sugerente trilogía de Nury y Vallée editada por Norma. Entremezclando realidad y ficción nos encontramos a un personaje de esos que epatan Josef Joanovici, un judío analfabeto capaz de hacerse millonario durante la ocupación nazi de Paris negociando con el mismo diablo, agenciándose incluso un carné de la Gestapo y acabar convirtiéndose en un héroe de la Resistencia. Visionario e inteligente. Capaz de poner una vela a Dios y otra al Diablo. Sin escrúpulos y con una sola meta, sobrevivir y ganar dinero… hasta que un modesto juez de provincias se cruce en su camino. Un comic de esos que crean afición y que se lee con deleite y expectación.




- Rituales. Si hasta ahora todo lo que he escrito ha sido bueno, no es el momento de escribir que este comic de Álvaro Ortiz es lo contrario. Me conformaré con decir que personalmente no le he cogido el punto. Con un buen arranque e incluso desarrollo, me parece que al final se desinfla bastante y se deja llevar por la inercia. En cualquier caso la génesis es original y podría haber ofrecido más.






- El Pasajero 23. Un best-seller de Sebastian Fitzek de esos que se leen tan rápido como se olvidan.Lo único que me ha quedado claro es que al parecer muchas personas desaparecen durante los cruceros de lujo. Afortunadamente nunca me han llamado la atención.